Description

La quema permanente de islas para poder hacer un uso intensibo de la ganadería no solo fué la causa del molesto ollín sobre el centro de Rosario. Sino que arrasaron las Islas. El principal humedal del país y uno de los principales de Sud América, fue arrasado. Hoy, solo hay vegetación en el perímetro externo. En el interior de las Islas, que antes eran una reserva extraordinaria de flora y fauna, hoy solo hay pastisales para la ganadería. No quedo nada. Ni arboles, ni arbustos, ni fauna, ya que la rica colonia de aves y mamíferos estan en extinción y/o migración. Sumado a ello, con maquinaria pesada cierran canales internos y secan lagunas. Todo ello amparado en la ley de tierras de Entre Rios, que dió a precio vil el arrendamiento de estas islas a ganaderos por 10 y 20 años, en procesos poco transparentes, sospechados de corrupción y con la complicidad de la Intendencia de Victoria.